domingo, 8 de agosto de 2010

Gran Diedro (Gran Galayo)

Continuando con la serie de posts sobre Los Galayos contando ya nuestra primera aventura escaladora. 

La primera aguja que subimos fue El Gran Galayo por la vía del Gran Diedro (nosotros a lo grande) y el encargado de abrirla fue Yamil. Aquí tenemos un croquis de la pared en cuestión, aunque la dificultad en nuestra opinión es mayor que la que ahí pone.



Desde el refugio se puede ver el Gran Galayo fácilmente. 


Sin embargo para hacer la aproximación a la vía no se hace por la ruta más directa. Hay que ir a la inmensa canal que se ve desde el refugio y subir por allí, bordeando el Pequeño Galayo. Es camino a seguir se ve en la siguiente foto.

Para identificar mejor la aguja se pueden ver todas en esta panorámica.

Imagen tomada de malditoduende.net
El Gran Galayo es la número 3, que es la segunda por la izquierda. La subida está marcada por items de piedras y requiere varias trepadas, aunque no es demasiado difícil. El problema es luego destrepar la vía, que sí que tiene algún paso un poco feo. La subida tendrá algún paso de II o II+ en todo caso.





Finalmente se ve desde lejos el Gran Diedro, que es muy fácilmente reconocible.


Allí llegamos a pie de vía, donde nos encontramos con otra cordada que iba a hacer la misma vía. Como ellos eran 2 y se la conocían les dejamos que entraran primero para acelerar las cosas. Allí nos hicieron la foto de antes de entrar a la vía.


A la vía se le entra desde una plataforma. Se puede asegurar perfectamente desde el suelo, pero por precaución nosotros decidimos hacer una reunión allí, para evitar en caso de caída saltar fuera de la zona. La reunión se hizo con mucha facilidad lazando dos piedras.


Desde allí Lore aseguró a Yamil en el primer largo. Este se hizo aprovechando la longitud total de las dos cuerdas (60 metros) ahorrándo así hacer una reunión en mitad del diedro. Hay que tener en cuenta que aunque las guías mencionan que hay algunos clavos en la pared estos están muy antiguos y son muy poco de fiar. Sin duda si las cuerdas dan de si es mejor hacer el diedro de un tirón.


El diedro es fácil de asegurar debido a la fisura que sigue y tiene un grado  máximo de IV+. Principalmente se usaron friends grandes y fisureros excéntricos. También había, como ya hemos dicho, varios clavos que se usaron, pero nunca confiando en ellos porque son bastante viejos.


La vía es muy bonita e impresiona por su longitudde unos 55 m.



Una vez arriba Yamil encontró la manera de hacer una reunión a prueba de bombas en un sitio bastante cómodo.



Y entonces subió el resto de la cordada.


Una vez allí nos hicimos la foto de rigor.


Una vez allí Yamil comenzó el siguiente largo. Este se puede empezar por dos rutas diferentes, siguiendo una cueva o bordeándola. Nosotros decidimos la segunda opción y salió un largo también bastante interesante. En la siguiente foto se puede apreciar muy bien por donde entra la vía.


El siguiente largo es mucho más corto (unos 20 metros), más fácil III+ y también bastante sencillo de asegurar. Finalmente llegamos a la reunión y nos hicimos ya la foto de la cordada feliz.


Aunque para pisar el punto más alto del Gran Galayo había que subir un poquito más. Entonces Lore se sacrificó para poder hacer la foto que atestiguara que se había llegado a lo más alto.


El descenso fue sin duda la parte más fea de la vía. No hay montado ningún rapel, así que se hace destrepando (obviamente no por la vía, sino por detrás). Está marcado mediante hitos de piedra, pero tiene algún paso algo más complicado y bastante expuesto, por lo que hay que ir con mucho cuidado. Sin duda es más peligroso que la escalada en si.


Resumen de la vía.

- Nombre: Gran Diedro.
- Aguja: El Gran Galayo.
- Dificultad: IV+.
- Largos: 2 con cuerdas de 60 metros, 3 en otro caso.
   * Largo 1: Longitud de unos 55 metros, dificultad IV+, siguiendo el diedro.
   * Largo 2: Longitud de unos 20 metros, dificultad III+,  bordeando la cueva hasta la cumbre.
(Se puede hacer otro largo al principio si no se ve claro el paso, este sale a III+) 
- Material necesario: Cuerdas de 60 metros, un juego de friends (grandes principalmente), juego de fisureros excéntricos y/o de cuña, 14 expreses, mosquetones y cintas para las reuniones, cascos, arneses y gatos.


Escrito por: Yamil Esteban, Loreto Gómez y Daniel Manzano.

viernes, 6 de agosto de 2010

Los Galayos

Recientemente fuimos Dani, Yamil y Lore a escalar a Los Galayos. Es una zona situada en la Sierra de Gredos famosa por sus múltiples agujas donde practicar la escalada clásica. Al prepararnos para ir echamos en falta información general y accesible vía internet, así que hemos decidido hacer una serie de posts con la intención de ayudar a los próximos aventureros. Las vías que os describimos son El Gran Diedro (Gran Galayo) y la Sur de la Apretura (Pequeño Galayo).

Lo primero es siempre la aproximación. El pueblo más cercano es Guisando y es bastante fácil de localizar vía Google Maps.


Ver mapa más grande


 Una vez allí hay que cruzar el pueblo para salir por el otro lado. Cuando este termina comienza una carretera de montaña que lleva sin problema a un aparcamiento/zona de comida llamada la plataforma del Nogal del Barranco. Allí dejaremos el coche para empezar a andar. 



El camino no tiene ninguna pérdida y está bastante bien señalizado. Allí nos hicimos la primera foto de cordada. 



La señalización dice que se tardan unas 2:30 horas en subir hasta el refugio, pero nosotros tardamos casi 5. Esto debe ser una mezcla entre un elevado optimismo por parte de la señalización mezclado con la barbaridad de peso que llevábamos para estar 3 días allí escalando. Para documentar eso nos hicimos las siguientes fotos.


















El camino sube serpenteando y muy bien señalizado, sin demasiada pendiente durante la -aproximadamente- mitad del recorrido. Durante este tramos hay dos fuentes donde se puede reponer agua. Después la pendiente se endurece mucho y hay dos opciones. O seguir una veredita por una canal, con una pendiente rompepiernas o seguir el camino marcado y entrar en la famosa zona de "las zetas". Desde allí ya se ve el refugio, aunque tan lejos que desanima un poco. Por la zona de las zetas hay otro riachuelo donde también es posible reponer agua. Toso esto, claro está si las fuentes llevan agua, que en verano es posible que se sequen.



Entonces, como ya he dicho, hay dos opciones. O se tira por la canal, con un caminito poco definido y mucha pendiente. 


O se siguen las interminables "zetas"


Nosotros elegimos la opción de las zetas principalmente por el peso. Subir esa canal con nuestros mochilones nos parecía una barbaridad. También hay que reconocer que tanta vuelta hace bastante pesado el viaje. 

Al final, justo antes de llegar al refugio hay que pasar por un par de trepaderos muy sencillos y a nosotros nos pillaba ya la noche. 


El refugio básicamente es una casucha no muy grande con una explanada al lado. Tiene una manguera que trae agua y que cuando llegamos no funcionaba, pero el guarda del refugio la arregló y nos fue muy útil en los días siguientes. Dormir dentro tiene dos precios: gratis si el guarda no está -como cuando llegamos- y 5 euros si sí está. Sólo puedes guardar tus cosas dentro si duermes allí -aunque esté vacío- y venden sólo bebidas.


La explanada que tiene al lado sirve de dormitorio si no quieres pagar por dormir -como nosotros- y también de helipuerto. El último día que estuvimos allí pudimos ver como se usa porque vinieron a rescatar a un herido. 



Desde el refugio, claro está, ya se tiene una visión estupenda de todas las agujas. 


Finalmente descansamos para comenzar con fuerzas el día siguiente. En los tres próximos posts narraremos en detalle las vías que subimos:  El Gran Diedro (Gran Galayo), Al Sur de la Apretura (Pequeño Galayo) y La Oeste (Punta Margarita).


Escrito por: Daniel Manzano, Yamil Esteban y Loreto Gómez