domingo, 19 de diciembre de 2010

Christkindlmarkt

Austria es un país muy religioso, católico principalmente, y por ello vive muy intensamente la navidad. Un ejemplo es el mercado navideño, o Christkindlmarkt, que ocupa gran parte del centro y que empezó el 15 de Noviembre y durará hasta el 6 de Enero. 

Este mercado se compone, como todos, de muchos puestos muy diversos. En ellos se puede comprar bisutería, artículos de decoración, ropa típica y muchas otras cosas más. El más movido se encuentra en la plaza del mercado 



Allí aparte de puestos hay también un tiovivo,


un  teatro infantil con marionetas, 


y un minizoo con su fogata y todo por si te da el frío. 


Aunque para combatir el frío tienen otro secreto los austriacos (y también los alemanes), se trata del Gluhwein, que no es más que vino caliente. Viene a ser vino tinto con zumos y algo de licor (como la sangría) pero caliente como si fuera un te. Lo preparan en unos enormes cazos y hay muchos puestos. Francamente muy bueno no está, pero se agradece con el frío. El precio estándar es de 2.50, pero tienes que pagar el depósito de la taza, otros 2 euros, aunque esto lo recuperas si no te la quieres quedar.


Aparte también hay decenas de puestos de comida, tanto de comida preparada, salchichas, crepes, pizza y demás, como puestos de dulces y de quesos, chacinas o pan. 


La otra parte grande del mercado se encuentra en Mariahilfer Strasse, por donde está el Tejadillo de Oro. Es bastante más grande y está más desahogada, eso sí en el fin de semana no se puede casi ni entrar, sobre todo debido a la inmensa cantidad de turistas italianos que hay. Eso hace que si te escuchan hablar español se dirijan a ti directamente en italiano. 

Aparte de comprar y comer también se pueden hacer otras cosas (pocas), como montar en un coche de caballos. 



O puedes visitar las tiendas para turistas que hay alrededor y probarte un sombrero tirolés, como hice yo (eso sí, con el gorro debajo que hace frío),






o como el que se probó Raquel



Aparte del mercado la ciudad está muy orientada a la navidad. La decoración e  muy bonita, sobre todo por la noche. 



Aparte de las luces en muchas paredes hay muñecos que representan cuantos infantiles, como Caperucita Roja. 

O la liebre y el erizo, que según me contó mi amiga Marina es la versión de "La Liebre y la Tortuga" que hay en los países donde no han visto una tortuga en su vida. 
Y con esto concluyo. Sólo espero que os animéis a visitar alguna navidad un país germánico, que no sólo hay que viajar en verano y además es algo muy, pero que muy interesante.